Casinos físicos legales en Chile

Los juegos de azar han tenido presencia en Chile desde finales del siglo XIX y una vez instalados en territorio andino han ido afianzándose con el paso del tiempo como una opción de entretenimiento muy popular entre la población.

Hoy en día el sector puede disfrutar de todas las modalidades disponibles gracias a los casinos online, pero esto no habría sido posible sin la contribución de los casinos físicos.

A pesar de que el primer establecimiento de juegos se construyó en el país allá por 1906, el sector siempre ha actuado sin marco regulatorio al margen de la ley. Hasta que el 7 de enero del año 2005 se dio un gran paso adelante con la creación de la ley Nº 19.995.

La norma estableció las bases generales para el funcionamiento de los casinos de juego chilenos y designó a la Superintendencia de Casinos de Juego (SCJ) como el ente encargado de denegar, renovar y revocar los permisos de operación de estos negocios.

Este decreto también estableció cinco categorías de juego como las autorizadas a explotar por parte de los casinos: ruleta, cartas, dados, bingo y máquinas de azar. Y a partir del año 2008 comenzó a conceder licencias de explotación, aunque marcándose unos límites muy claros.

Cada región del territorio puede tener un máximo de 3 casinos reglamentados y además debe tener un mínimo de 1 activo, salvo la región Metropolitana donde no se pueden instalar. El país no puede sobrepasar los 24 centros en total.

Esta ley ha ido sufrido modificaciones y actualizaciones con el paso del tiempo, pero es la que sigue imperando en Chile y por la que se tienen que regir los casinos que actualmente se encuentran operando. Te dejamos una descripción de los que existen en cada región.

Antofagasta

La región de Antofagasta, en el extremo norte del país, siempre se ha caracterizado por un espíritu muy restrictivo con los juegos de azar. Durante muchos años en esta parte del país se ha combatido con dureza contra los casinos populares, y aun así sus casinos físicos cuentan con una amplia antigüedad en cuanto al inicio de sus operaciones.

Arica y Parinacota

Arica y Parinacota es una región turística por situarse en la frontera norte de Chile y siempre ha tenido una buena relación con los casinos de juegos. De hecho, el Casino Arica estuvo activo en su ciudad homónima durante más de 60 años, hasta que finalmente tuvo que cerrar por problemas con su licencia de juego. No obstante, todavía mantiene otros locales activos.

Atacama

Parece insólito pensar que el juego haya podido abrirse paso en mitad del Desierto de Atacama, pero la lucha de los empresarios del sector ha contribuido para que el sueño se hiciera realidad. En una región árida y poco poblada ha florecido el empeño que han puesto sus habitantes por incluir juegos de apuestas físicos.

Aysén

La región de Aysén del General Carlos Ibañez del Campo, como es su nombre oficial, es uno de los territorios que más está trabajando desde los inicios por hacer respetar las bases de la ley 19.995 y combatir contra el juego clandestino que existe en su perímetro. Además se espera que a partir de 2027 puedan producirse cambios en cuanto a las licencias de casino que actualmente tiene activas.

Biobío

Desde que la nueva ley de casinos entró en vigor, la región del Biobío se mostró muy interesada en poder obtener más de una licencia con la que atraer a la zona a nuevos inversores del mundo del entretenimiento. Y tras conseguirlo e inaugurar sus centros de juego, se ha convertido en el único departamento del país que cuenta con casinos en dos zonas diferentes (Zona Centro y Zona Sur) dentro del entramado de la SCJ.

Coquimbo

La región de Coquimbo es una de las más curiosas de analizar en cuanto a sus recintos de juego, puesto que algunos de ellos existen desde hace muchos años, pero no se han adaptado al marco regulatorio de la SCJ hasta hace relativamente poco. Por eso es que parece que las apuestas son algo novedoso en la zona, cuando sus habitantes llevan pudiendo disfrutar de ellas desde el pasado siglo XX.

La Araucanía

La región de La Araucanía es una zona propicia para combinar lo mejor del mundo de los casinos con lo más positivo de un entorno en el que abundan los parques nacionales y los ecosistemas con lagos y ríos como principales protagonistas. Sin embargo, sus casinos físicos no han tenido una vida fácil hasta que han podido asentarse y resultar rentables. Pero lo han conseguido.

Los Lagos

Al sur de Chile, la región de Los Lagos es un área ideal para entender los casinos como enclaves turísticos-regionales al abundar bosques, montañas y lagos andinos llenos de historia y de múltiples oportunidades de ocio. La administración ha sabido aprovechar este tirón vacacional para instalar casinos de gran calidad en puntos clave.

Los Ríos

La región de Los Ríos no tardó en buscar autorización para la creación de un centro de juego en la confluencia de los tres ríos que recorren la zona cerca de la costa. No obstante, ha caído en el conformismo los últimos años y se ha limitado a mantener unos números mínimos en este sector, en el que podrían ser mucho más ambiciosos por las condiciones de su territorio.

Magallanes

La región de Magallanes y de la Antártica Chilena copa el extremo sur del continente sudamericano y de la Patagonia, y eso le convierte en un buen departamento para albergar negocios de juegos de azar. Ya cuenta con casinos físicos en el territorio, pero busca ampliar la lista mediante sitios estratégicos donde su asentamiento sea sencillo.

Maule

Uno de los puntos de Chile que más ofertas ha recibido para la recepción de nuevos casinos físicos es la región del Maule, en la zona central del país. En un área en el que el sector primario tiene mucho peso, se antoja fundamental la instalación de centros de entretenimiento relacionados con el sector terciario y el juego. Los casinos ya existentes siempre han tenido problemas con sus licencias y podrían ser sustituidos en el futuro.

Metropolitana de Santiago

La Región Metropolitana de Santiago es una de las pocas zonas del país que no cuenta con casinos, ya que así lo establece la ley 19.995 que impera en todo el territorio. Las razones radican en la presencia de la capital Santiago de Chile en este departamento, sin duda la ciudad más poblada con diferencia, y en la que se podrían extender con mayor facilidad los problemas relacionados con el juego. Además, el Gobierno prefiere promover el desarrollo económico de otras zonas.

Ñuble

Por tratarse de la división más jóven de todo el país, la región del Ñuble ha sido la última en disfrutar de los beneficios de un casino físico en su territorio. Una vez que chilenos y extranjeros descubrieron las amplias posibilidades de esta zona central, dispuesta de cordilleras montañosas pero también de mar y costa, su Gobierno buscó un nuevo incentivo de ocio con el que completar una oferta ya bastante interesante. Y de momento está teniendo éxito.

O’Higgins

La región del Libertador General Bernardo O’Higgins cuenta con gran importancia para el sector de los casinos en Chile, puesto que fue la primera en albergar un casino en el país (Casino Pichilemu – 1906). Pero es que también fue de las primeras en conseguir permisos licenciatarios por parte de la SCJ y en poner en funcionamiento sus negocios. Por eso ahora estos son de los más importantes del territorio.

Tarapacá

En la frontera norte con Bolivia, la región de Tarapacá es la única a día de hoy en Chile en la que no se están cumpliendo las condiciones establecidas en la ley de casinos 19.995. Eso es porque en todas las regiones debe haber un mínimo de un casino y actualmente este territorio no lo tiene. Ya son varios años los que llevan con luz verde a la construcción de un centro de juegos, pero los problemas burocráticos lo han impedido hasta la fecha.

Valparaíso

La región de Valparaíso también ocupa un lugar destacado en el sector de los casinos en Chile, pues se trata de la única que en estos momentos alcanza el límite máximo legal de 3 casinos físicos activos en un mismo territorio. Esto se entiende debido a las características de la zona, las ciudades resort que se han erigido en ella y la presencia de islas exóticas en sus alrededores.